En primer lugar, es importante señalar que la areola es la parte del pecho que rodea al pezón y que presenta un tono de piel más oscuro o pigmentado. En ocasiones, debido a factores genéticos, malformaciones o cambios durante el embarazo o la lactancia, esta región de la mama puede experimentar desproporciones en relación con el tamaño del pecho. En algunos casos, las areolas de ambos pechos pueden ser diferentes, generando asimetrías visuales.
A través de una sencilla intervención de cirugía plástica, es posible corregir y ajustar el tamaño desproporcionado de las areolas o igualarlas para evitar asimetrías. Estas intervenciones suelen llevarse a cabo como parte de procedimientos estéticos más amplios, como el aumento o reducción de pecho, la corrección de mamas tuberosas o incluso en casos de ginecomastia en hombres.
Este procedimiento quirúrgico es considerado una cirugía menor, permitiendo su realización con anestesia local y una duración que generalmente no supera los 60 minutos. La intervención se lleva a cabo de manera sumamente poco invasiva, buscando minimizar al máximo la cicatrización para lograr que sea prácticamente imperceptible. Como se mencionó previamente, esta cirugía suele realizarse en conjunto con otras intervenciones mamarias, como la elevación, reducción o aumento de pecho. La combinación de estos procedimientos proporciona resultados espectaculares en la estética mamaria.